Que el frío no aflija al corazón viajero,
aunque el viento roce con su canto austero.
Hay brasas ocultas bajo la nieve fría,
esperando encenderse con su melodía.
Cuando el cielo se viste de gris y de escarcha,
recuerda que hay soles que en silencio se marchan,
y en cada suspiro guarda en su latido
un calor que despierta lo que parece dormido.
No temas a las sombras Ni al hielo en la piel,
pues dentro de ti hay un cálido laurel.
Tu risa, aun quieta, germina estaciones
y abriga a los tristes poetas con sus vibraciones.
Que el frio no te aflija dulce caminante,
abre tus ventanas al sol mas constante:
el amor que guardas humilde y callado,
vence a la neblina, y lo deja encantado
Autor. Luis Alberto Morales Guerra.
Seudónimo. Luis Alberto Del Alba.
Reservados todos los derechos de autor.
Escrito en Casablanca Valparaíso Chile
comoescribeunangel.blogspot.com