El HIJO Y LA MADRE
Recuerdo, cómo te empapaba el agua
que corría sobre tu espalda,
aquella triste mañana te marchaste
cuando llovían lluvias tempranas.
El calor del verano te acariciaba
el rostro, como te mojaban los
inviernos como si nada
te importara.
Fuiste tejedora de sueños,
fuiste mujer obrera que ibas
tejiendo esperanzas sobre los
molinos del viento.
El sol te cubrió con sus alas,
las flores de tú jardín se vistieron
de gala con un hermoso tocado
que estaba cubierto de escarchas.
gotas cristalinas caían sobre tu cara,
flores desojadas por el viento
se volcaban a tu paso, se están
marchando las madres de tu
ciudad amada.
Madre, tengo una ansiedad tan extraña,
siento que me acaricias el alma, tendiste
tu manto aquella madrugada sobre mi pecho
para que el frío no me quemara.
Me acunaste aquella noche cuando
despertaba la aurora,
era como un sol la luna cuando
el frio nos embriagaba.
Todo me lo contaba el viento,
y el amigo de mi vieja nana.
lo vi cuando arrancaba las rosas
a través del cristal de tu ventana.
Autor. Luis Alberto Morales
Seudónimo. Luis Alberto Del Alba.
Reservados todos los derechos de autor,
Casablanca Valparaíso Chile.
poesía Inédita.
comoescribeunangel.blogspot.com
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